La Hna. Lisa Buscher, de la Sociedad del Sagrado Corazón, comparte dulces con niños en un albergue para migrantes en Mexicali, México, el 9 de mayo de 2023. La religiosa, que trabaja con migrantes y refugiados en San Diego y comunidades fronterizas cercanas, insta a tener una visión compasiva para con ellos. (Foto: GSR/Rhina Guidos)
Nota de la editora: Global Sisters Report lanza Acogiendo al Extranjero, una nueva serie que examina más de cerca a las religiosas que trabajan con inmigrantes o migrantes. Las entregas presentarán a hermanas y organizaciones que colaboran en red para servir mejor a quienes cruzan las fronteras, explorarán las tendencias migratorias mundiales y abordarán el tema de la inmigración en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos.
A medida que la inmigración se convierte en un tema candente para las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, religiosas y otros católicos nos apremian para que tengamos una mirada cristiana compasiva hacia aquellos que, en números sin precedentes, huyen de situaciones peligrosas.
"Si cambiáramos lo que se predica en nuestros púlpitos y habláramos de un Dios que emigra hacia nosotros, tendríamos una comprensión diferente de lo que son las personas en movimiento, los migrantes", dijo la Hna. Lisa Buscher, de la Sociedad del Sagrado Corazón, en una entrevista el 8 de enero con Global Sisters Report.
Las autoridades documentaron en diciembre más de 225 000 encuentros con migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México, un récord mensual. No fue una sorpresa, ya que el Gobierno había publicado cifras dos meses antes de un récord de 2,5 millones de detenciones en la frontera sur en el año fiscal 2023. Este fue el tercer año consecutivo de récords, informó The New York Times;
"El mandato de nuestro Señor Jesucristo es muy claro: 'Yo era extranjero y vosotros me acogisteis'": cardenal Álvaro Ramazzini, sobre el tema migratorio en EE. UU.
La reciente práctica de los republicanos de trasladar a muchos de esos inmigrantes desde ciudades fronterizas a localidades gobernadas por demócratas ha hecho que políticos de ambos bandos insten al Gobierno federal a hacer algo para detener el flujo. Algunos han expresado públicamente su frustración, y republicanos y demócratas del Senado están trabajando juntos en un acuerdo que concedería a la administración de Biden dinero para Ucrania, si acepta limitar un estatus temporal llamado libertad condicional humanitaria, que ha permitido permanecer en el país a un gran número de inmigrantes —incluidos los procedentes de Ucrania y Nicaragua—.
Pero no es la única muestra bipartidista de descontento en materia de inmigración.
En septiembre de 2023, el alcalde de Nueva York Eric Adams, cuya ciudad empezó a recibir a principios de año autobuses llenos de migrantes enviados por el gobernador de Texas Greg Abbott, dijo que no veía la forma de solucionar los problemas asociados a una migración tan rápida —alimentación y alojamiento de emergencia y aumento de la matrícula escolar— y afirmó que "destruiría la ciudad de Nueva York". El expresidente Donald Trump dijo en un mitin en 2023 que los migrantes están "envenenando la sangre de nuestro país".
Era un sentimiento compartido por el 81 % de los votantes de las primarias republicanas, según mostró una encuesta de enero de CBS News. Algo menos de la mitad de los demás votantes encuestados, alrededor del 47 %, también estaban de acuerdo.
Un trabajador humanitario saluda a los inmigrantes que llegan de Texas en autobús a la terminal de de Port Authority, en Nueva York, el 10 de mayo. (Foto: OSV News/Reuters/Andrew Kelly
Para religiosas como Buscher, que trabaja con inmigrantes y refugiados en la zona de San Diego, es difícil entender los sentimientos.
"No se trata de personas que intentan alzarse", afirmó.
Buscher instó a echar un vistazo crítico a la migración mundial, y verificar cómo conflictos como la guerra rusa contra Ucrania y los que ocurren en África continental, aunados a las condiciones económicas y políticas en América Latina, el cambio climático y el hambre, han estimulado un flujo mundial de personas, siendo Estados Unidos uno de los muchos destinos a los que la gente se dirige.
"Se trata de personas corrientes en circunstancias extraordinarias. Podría ser cualquiera de nosotros", expresó.
En la tradición católica, sostuvo la religiosa, es algo con lo que la Sagrada Familia tuvo que lidiar cuando José y María huyeron de su tierra natal para proteger al niño Jesús de ser asesinado por el rey Herodes; de la misma manera, las familias de hoy en día huyen para proteger a sus hijos de 'los Herodes' contemporáneos.
"Todo está en nuestras historias bíblicas; todo forma parte de la huida de Egipto", dijo Buscher a GSR. "La gente emigraba entonces. Olvidamos esa parte de nuestra historia", acotó.
La Hna. María de los Dolores Palencia Gómez, de las Hermanas de San José de Lyon, quien trabaja con migrantes en México, se detiene a charlar con dos hermanas en Bogotá, Colombia, 24 de noviembre de 2023. La religiosa dijo que la enseñanza cristiana hacia los migrantes puede encontrarse en el libro de Mateo, "que nos dice claramente: 'Me vestisteis, era extranjero y me acogisteis'". (Foto: GSR/Rhina Guidos)
La Hna. María de los Dolores Palencia Gómez, de las Hermanas de San José de Lyon, quien trabaja con inmigrantes en México, aseveró que es difícil saber qué diría ella a los políticos estadounidenses que presumen de su cristianismo y, sin embargo, 'utilizan' el sentimiento antiinmigrante para atraer votantes.
"No creo que sea posible, como católicos, sentirnos como exentos de acoger a un hermano o hermana. Basta mirar [el libro de] Mateo, que nos dice claramente: 'Me vestiste, era extranjero y me acogiste'", dijo Palencia a GSR durante una conferencia de prensa en Bogotá, Colombia, el 24 de noviembre de 2023.
Palencia añadió que la utilización de los inmigrantes y la inmigración para obtener beneficios políticos o dividir a una comunidad no se limita a Estados Unidos. En México, un país que también elige presidente en 2024, "los políticos utilizan temas candentes" relacionados con la inmigración para hacer "propaganda a favor o en contra", sostuvo.
Sor María Elena de San José, de las Adoratrices Perpetuas del Santísimo Sacramento, hace fila para cruzar a los Estados Unidos en el puerto de entrada del Puente de las Américas, desde Ciudad Juárez, México, hacia El Paso, Texas, el 13 de mayo de 2023. La hermana dijo que su orden contemplativa reza para que los gobiernos puedan asistir mejor a los migrantes. (Foto: GSR/ Rhina Guidos)
Algunos políticos pueden incluso decir que votan en contra de algo como el derecho al aborto, por ejemplo, debido a su visión cristiana pro-vida, y sin embargo se oponen a la inmigración - algo que aquellos como Palencia dicen que es "incoherente" con las creencias cristianas.
"Cada vez que hablamos de [posiciones o temas] provida, acabamos discutiendo sobre el aborto, pero yo digo que si eres provida, tienes que defender toda la vida, empezando por la vida de madre tierra, la vida de un ser humano en cualquier etapa, y la defensa de la gente que se muere de hambre, porque ser provida es defender la vida de los que no tienen derechos", argumentó Palencia, quien añadió que, en muchos casos, eso implica la vida de los inmigrantes.
Para el cardenal Álvaro Ramazzini, obispo de Huehuetenango, Guatemala, quien habló el 9 de noviembre en Washington con GSR —junto con el obispo de El Paso Mark Seitz—, el compromiso de un cristiano de cuidar la vida incluye la inmigración, y significa preocuparse por las condiciones que sustentan una vida digna en otros países.
El cardenal Álvaro Ramazzini, obispo de Huehuetenango, Guatemala, pronuncia su homilía mientras celebra una misa especial en honor al Cristo Negro de Esquipulas, Guatemala, el 5 de enero de 2020, en la Catedral de San Patricio, ciudad de Nueva York, Estados Unidos. (Foto: OSV News/Gregory A. Shemitz)
En Guatemala, hombres y mujeres jóvenes sueñan con salir en busca de trabajos que no existen en sus pueblos rurales. La corrupción del Gobierno, la violencia, la falta de atención al desarrollo económico en las zonas pobres y el cambio climático han llevado a muchos a arriesgar sus vidas por sueños que no siempre se cumplen emigrando, dijo.
"Hay una atracción por venir aquí [a Estados Unidos] pensando que tendrán un futuro mejor, porque esa es la promesa de los coyotes [contrabandistas]", dijo y agregó: "Pero a menudo [los migrantes] llegan a Estados Unidos. y se encuentran sin trabajo, y son expulsados o amenazados en lugares como Florida porque no tienen documentos [legales]. Es un gran problema y tenemos que concienciarles de que los sueños dorados de venir a Estados Unidos pueden convertirse en una pesadilla. No es lo que esperan".
Quienes en Estados Unidos se preocupan por el aumento de la migración deberían preocuparse también por mejorar las condiciones en los países de origen, encontrando formas de fortalecer la democracia, los derechos humanos, la seguridad y la paz en otros lugares, dijo monseñor Seitz, presidente del comité de migración de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, que ha trabajado con grupos religiosos explorando formas de aliviar las causas profundas de la migración.
Aunque se habla mucho de los migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México, los países de los que proceden también sufren "una gran pérdida de seres humanos con valores y sueños" que a veces caen en la "ilusión" de llegar a un país que no siempre les acoge, aseveró Ramazzini.
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Al obispo de Huehuetenango le desconcierta, cuando viene a Estados Unidos, que la gente se sienta orgullosa de hablar de una identidad cristiana.
"Cuando vengo de visita, y tengo la oportunidad de decir algo, pregunto: '¿Qué tipo de fe cristiana viven aquí? Porque el mandato de nuestro Señor Jesucristo es muy claro: Yo era extranjero y ustedes me acogieron. Me da mucho que pensar en Estados Unidos, donde muchos profesan el cristianismo, pero no veo una práctica de esa fe cuando me encuentro con un sentimiento de xenofobia, un sentimiento contra los migrantes", declaró a GSR. "Los migrantes no son ladrones. No vienen aquí a robar. Vienen a trabajar", enfatizó.
Ramazzini aseveró que es consciente de la fuerte cultura de la separación de la Iglesia y el Estado. Aun así, ayudar a una persona necesitada "no es una cuestión religiosa", dijo, sino "una cuestión de humanidad".
Por eso, el obispo les dice a los guatemaltecos que piensan ir a Estados Unidos que emigrar significa sufrir "por el frío en invierno [o por] el calor en verano" y "entrar en contacto con gente que no habla el mismo idioma [español]".
"Yo les digo que van a encontrar un futuro diferente, y sí, puede que ganes muchos dólares", dijo. "Pero no les dicen qué tipo de trabajo van a hacer, las dificultades de cruzar la frontera; no les hablan de ninguno de los aspectos negativos, [como] la separación de las familias, la erosión de la fe por las exigencias del trabajo... en otras palabras, el lado feo de la inmigración", acotó.
Nota: Este artículo fue publicado originalmente en inglés el 24 de enero de 2024.